domingo, 11 de febrero de 2018

Estaciones de la vida





Afuera, la algarabía
de chiquillos alocados
que no paran de jugar.
Dentro de mí, la alegría
de la juventud primera,
de esa feliz primavera
repleta de libertad.

Afuera, el sol del verano
y a veces  pasos furtivos
que van a ningún lugar.
Dentro tú y yo, desquitándonos
de tanto sueño oprimido,
de tanto libro didáctico
y de tanta soledad.

Afuera, las hojas muertas
bailando un rítmico vals
con el viento del otoño.
Dentro, nuestro dulce hogar:
dos retoños malcriados
y un amor tibio y cansado
de tanta mediocridad.

Afuera ruge el invierno
y el viento llama con furia
golpeando en el cristal.
Dentro yo, solo, decrépito,
llorando tu larga ausencia
y añorando aquel verano
en que me enseñaste a amar.